Lo
más importante en Diablo es elegir la clase de personaje
más apropiada a la forma de 'combate' que uno tenga en mente. Si
gustamos de usar magia, pero no queremos dejar de lado la posibilidad de
peleas cuerpo a cuerpo, la única opción es el Paladin.
Por otro lado si queremos controlar las mentes de otros y monstruos poderosos
del enemigo, habrá que elegir al Necromancer. Para quienes
gusten de correr y atacar de la distancia la Hechicera o la Amazona
son las indicadas. Finalmente para los fanáticos de usar todo tipo
de armas y enfrentarse directamente con el enemigo el Bárbaro
es la opción adecuada.
Una vez elegido el personaje habrá
que decidir, en camino, cuales de sus capacidades uno quiere evolucionar
en una primera instancia cada vez que gane los puntos suficientes, esto
viendo el Árbol Tecnológico de cada clase. Luego también
habrá que tener un buen arsenal adecuado a nuestro personaje y las
no menos importantes armaduras, gemas, joyas y todo lo que ayude a incrementar
alguna facultad.
Finalmente lo mejor es tener un personaje
tan evolucionado como posible y ya que ahora Diablo 2 da más
libertad con el cumplimiento o no de todas las búsquedas, se recomienda
no dejar ninguna de lado y realizarlas todas --para tener un personaje
mejor preparado.
Al
igual que en Diablo, siempre es mejor escapar y volver a la batalla
luego que morir en el intento de enfrentar a decenas de monstruos cuando
uno esta mal. No olvidar tener pocimas de vida y un hechizo, o papiro,
de Portal, al primero para recuperar vida, al segundo para escapar.
Diablo 2 tiene una enorme cantidad
de monstruos, más aún con sus monstruos súper-únicos,
como los Tres Hermanos, y sus monstruos únicos, además
de los normales. Los monstruos únicos son, en realidad, monstruos
normales con alguna facultad incrementada, puede ser ataque, auras de protección,
resistencias a ciertas armas o hechizos, etcétera. Tal como en Diablo,
los monstruos únicos los vemos en tonos o colores diferentes a los
de sus contrapartes normales --a parte de que normalmente arrojan mejores
armas y más dinero.
Sólo hay una regla en Diablo
2, al igual que en su predecesor, atacar y destruir todo sin sobreestimar
a los monstruos pequeños, esto último en especial al inicio
del juego cuando nuestro personaje no anda muy fuerte. Tampoco hay que
olvidar de volver al pueblo tras una batalla larga y difícil para
arreglar armaduras, armas y recuperar fuerzas. Diablo 2 es mucho
más largo que Diablo así que hay que ir con cuidado.