Muchos años después de que
fuese destruido el Portal Negro que unía la tierra Orc de
Draenor
con la Humana de Azeroth, un joven Orco llamado Thrall fue
capturado y criado como esclavo de humanos que seguían el camino
de la traición en vez de aquel del honor.
Utilizando
las destrezas aprendidas de sus captores más su propio corage
y fuerza naturales, Thrall escapo y, una vez libre, se puso en
busca de aquel pasado y herencia que le fue negado. Encontrándose
con que su gente era obligada a vivir pacíficamente en reservas
controladas. El joven guerrero va en busca de los pocos y dispersos
clanes Orc que habían logrado escapar de las garras de la Alianza.
Desde sus campamentos en las oscuras selvas, Thrall prometio
guiar a sus compatriotas de vuelta al nivel de vida que su herencia
Orc les demandaba. Bajo el mando de Thrall como nuevo Comandante
de la Horda, los Orcs redescubrieron su cultura shamanistica perdida
y utilizaron este reencontrado poder para revelarse contra sus crueles
carceleros.
A
medida que las luchas sociales se hacen presentes a lo largo y ancho
de la Alianza, las tierras de Azeroth se ven sometidas
a extraños cambios; la presencia de un nuevo, e invicible enemigo
se hace sentir cercana. Finalmente, luego de una nada natural tormenta
caída de los cielos, llega la Legión de Fuego.
Maldecidos a vagar por las dimensiones por siempre y a consumir energía
mágica para sobrevivir, la Legión ha destruido
mundo tras mundo en su insaciable necesidad de poder Arcano.
Inteligentes, siniestros y aparentemente imparables, estos asesinos
de la oscuridad han llegado a este mundo no sólo para consumir
su magia, pero para destruir toda vida que en él se encuentre.
Ahora, con una invasión mayor en
sus puertas, la re-unida Horda y los ejercitos de Azeroth
han cambiado sus objetivos de conquista, traición, defensa u honor
por el de la simple sobrevivencia...