La presente miniguía no es tanto
un paso a paso de lo que hay que hacer como indicios y reglas generales
que encausen los esfuerzos. Esto para que pasar el nivel no se torne en
seguir una receta, al igual que para que pueda adaptarse al ejército
que cada cual ha creado y no sea necesario además incluir un menú
de las criaturas ha utilizar.
Escenario 8: The Wicked Sky Witch.
Contra Madame LaPette y sus dos Ayudantes.
En ésta misión los
problemas surgen tras cumplir la primera parte donde hay que eliminar a
unos exploradores, momento a partir del cual nos empiezan a atacar con
gran tozudez e insistencia. Lo difícil es lograr defenderse de tres
ejércitos enemigos, y por ende una gran cantidad de criaturas.
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Es indispensable generar varias criaturas
con capacidad antiaérea en cuanto terminemos con los exploradores
y/o colocar varias torres de defensa eléctrica.
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Como nos atacan criaturas que son venenosas
conviene tener alguna propia que sea inmune. En éste nivel obtenemos
al Tiburón Martillo que nos permite hacer varias combinaciones muy
útiles y eficientes al respecto. Lo mismo ocurre con el Dragón
de Komodo. Conviene aprovecharlos. Con una criatura capaz de aguantar veneno
colocamos la balaza un poco a nuestro favor.
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La regla para triunfar es 'divide y vencerás'.
Resulta claro bastante temprano que defender la zona aledaña al
Laboratorio es una tarea muy difícil y que no tarda en tornarse
imposible. Hay que iniciar una base secundaria para sacar carbón
en la mina a la derecha de donde atracamos lo antes posible, esto presenta
a los enemigos con dos frentes y por ende los divide y desconcentra la
fuerza de su ataque. Acto que facilita la defensa de ambos puntos.
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Es recomendable establecer perímetros
de defensa con torres y cactus; y gestionar con cuidado las unidades de
rango con ataque de dispersión (artillería).
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Utilizar a Rex y sus dardos tóxicos
con eficiencia en vez de dejarlo bien guardado en retaguardia sirve de
mucho.
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Contra las irritantes unidades de rango del
enemigo nada como unas propias de ataque cuerpo a cuerpo que sean inmunes,
se regeneren, o puedan ir rápido darles una paliza y volver. Cuidar
de que no persigan a nadie.
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Para esta misión conviene ya tener,
o combinar, una criatura con la característica de poseer cuernos,
buena velocidad, buen ataque/defensa y un número decente de puntos
de vida (léase, por los 200 arriba).
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En cuanto notamos un balance favorable al
momento de repeler al enemigo hay que pensar en la manera de destruir una
de las bases de los ayudantes; la de la derecha (celeste) es, en principio,
la más apropiada. Basta con debilitar sus defensas y luego lanzarse
de manera contundente y con el mayor número de tropas, dejando atrás
un grupo para proteger las bases, al igual que teniendo reservas de mineral
y energía para producir rápido una segunda ola si requerido.
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Tras tomar la base a la derecha recuperar
lo más rápido --y lo antes-- posible el mineral del área,
sobretodo aquel bajo el risco.
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Una vez que sólo quedan dos oponentes
hay varias posibilidades para dar cuenta con los objetivos que dependen
del tipo de ejército que tengamos y el estilo de juego de cada uno.
La única nota en éste punto es apretar la economía
del oponente, evitando que extraiga de las minas del centro, las cercanas
a nuestra segunda base, y las de la base que acabamos de eliminar, esta
tarea la cumple con eficiencia cualquier unidad aérea de buen ataque
y aguante al rondar las minas.
Escenario 12: The Good Doctor. Contra
el Doctor Ganglion.
Aquí la dificultad surge
del poder de las unidades que nos atacan, sobretodo llegado el nivel III
para arriba, y la tozudez de dichos ataques.
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Algo que es indispensable aprovechar en esta
misión es la capacidad de curar unidades de nuestros peones y los
oasis. Esto último nos lo da ha entender Lucy pero no con suficiente
claridad.
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Lo primero es armar defensas, y generar criaturas
de nivel II y/o III para repeler los primeros ataques, luego hay que abalanzarse
sobre el laboratorio de producción enemigo en el oasis cercano (prácticamente
a la salida y hacia el noroeste de donde atracamos).
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En esta misión conviene contar con
tropas de capacidad antiaérea de buen poder, al igual que con una
artillería de buen rango.
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Alcanzado cierto balance no hay que sentarse
sobre los laureles sino iniciar la ofensiva con gran rapidez. La orden
del día es quitar al enemigo tantas minas como sea posible.
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Mientras pasamos a la ofensiva también
hay que estar listo para la defensa, porque cuando viene llega con todo.
En éste punto es muy útil el Radar Pulse para saber
si viene o no y por donde. Lo que hay que tomar en cuenta es que el terreno
por donde el enemigo tiene que pasar es muy apto para las emboscadas y
para realizarlas nada como unidades que pueden enterrarse. El Dr. Ganglion
ataca con tropas de artillería así que lo hay que evitar
es tener que avanzar hacia ellas, el daño por dispersión
elimina aún grupos rápidos y/o de gran resistencia si su
avance es visible. Un grupo decente y disperso de unidades enterradas puede
salir en el momento adecuado y rodear al enemigo de tal manera que no pueda
utilizar su ataque de rango. Combinar hormiga (tiene la ventaja de su defensa
sobre otros que también se esconden/entierran) con otro animal que
le de mayor cantidad de puntos de vida y un ataque más poderoso
es la clave del éxito.
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Logrado un balance en la defensa la cosa es
continuar con la ofensiva por el lado derecho tomando control de todas
las minas, pero con cuidado porque esto enoja al oponente, además
que sus ataques aéreos pueden ser muy peligrosos, al igual que los
terrestres directos cuando van donde no son esperados.
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También es buena idea eliminar las
cámaras acuáticas, y evitar que construya más.
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Alcanzado un balance en la ofensiva es cosa
de acumular tropas y avanzar sobre el enemigo con fuerza e insistencia.
Ojo, no descuidar los recursos propios, a la vez que evitamos que los obtenga
el Dr. Ganglion.
Escenario 15: Seeds Sown. Batalla
Final.
El factor problema aquí
es la cantidad de oponentes y su poder. En particular cuando todos llegamos
o pasamos el nivel III.
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Como empezamos con unidades de 'regalo' lo
primero es eliminar la base minera a la derecha de nuestro punto de desembarco.
Aquí conviene no darle tiempo para nada y atacar en cuanto inicie
el nivel. Esto cumple dos cosas: obtenemos una mina más y eliminamos
temprano una fuente de problemas y ataques. Ir directo hasta el interior
de la base, olvidar las defensas y dejarlas para después.
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También conviene eliminar la cámara
acuática en la parte superior derecha lo antes posible. Evita ataques
constantes a la retaguardia.
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Durante la primera fase de la batalla conviene
tener unidades de producción rápida y ataques contundentes,
más artillería.
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Una de las prioridades obvias es eliminar
las defensas enemigas en el camino hacia sus bases, y la bendita cámara
acuática en medio del acantilado.
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Pasada la primera fase del combate (los primeros
15-20 minutos), más vale contar con un par de unidades de gran poder/tamaño
para lograr hacer frente a las mega criaturas del enemigo. No hay tanto
una necesidad de contar con lo más grande, como con una criatura
bien balanceada de alto nivel. Una gestión apropiada de las tropas
que poseemos es indispensable para lograr el triunfo. Unidades anfibias
o aéreas no son requisito pero dependiendo el estilo de juego pueden
ayudar bastante.
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Conviene subir el acantilado lo más
rápido --y antes-- posible, evitando al máximo las perdidas
para dar cuenta de la primera base y tomar control de sus minas, luego
es cuestión de aguantar un poco, organizar fuerzas y empezar a avanzar
sobre el enemigo.
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Al avanzar --una vez el área esté
asegurada-- no olvidar de crear laboratorios de producción más
cercanos a la zona de combate para no perder tiempo y unidades por la espera
a que lleguen. Aún unidades muy fuertes sucumben ante ataque de
muchas otras de menor poder.
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Es buena idea eliminar las cámaras
aéreas en la zona noroeste del acantilado, para evitar que anden
rondando el mapa y eliminando nuestras bases mineras, o debiliten tropas
en tránsito.
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