Las misiones, o mapas, de la campaña tienen preestablecidas sus condiciones de victoria, como por ejemplo sobrevivir 30 minutos, destruir un edificio enemigo, o llegar a cierta Edad evitando que el enemigo nos destruya. No así cuando jugamos el modo skirmish (random map) contra oponentes controlados por la PC, o en modo multiusuario, en este caso podemos elegir entre varias condiciones de victoria, puede ser al primero que haga su maravilla, al que reuna más recursos, al que obtenga más puntos, al que obtenga los carritos que están en algún rincón del mapa, etcétera. El caso es tener decenas de maneras diferentes de jugar lo mismo. Aunque gracias al generador aleatorio de mapas con que cuenta este juego 'lo mismo' no es algo que lleguemos a ver muy pronto, si alguna vez.

La Inteligencia Artificial que controla a las unidades es bastante lúcida, al menos en ciertas ocasiones. Si el oponente es la PC hay que tener en cuenta que resulta  un hueso duro de roer, en especial en los mapas donde ya tiene ventaja al tener su ciudad construida y bien defendida. Sus ataques si bien tozudos no son del tipo que envía una a una las unidades que son producidas; en general arma un buen grupo antes de molestar, lo cual da tiempo para preparar una defensa o contraofensiva. La IA de búsqueda de caminos es bastante buena, en todo caso no dispersa (tanto) unidades cuando la salida indicada esta bloqueada. Cuando movemos por escuadrón hay que tener cuidado con el hecho de que existen tropas más rápidas, esto para evitar que la supuesta defensa llegue demasiado tarde. Como siempre ojo con la brillantes de las catapultas las que no avisan al atacar un grupo que tiene más de nuestras unidades que del enemigo, lo que puede resultar irritante y peligroso.

Jugar la campaña, competir contra la PC en batallas instantáneas ambos resultan divertidos, pero jugar contra otros usuarios lo es mucho, mucho, más. La modalidad multisuario de Age of Empires permite hasta ocho jugadores por Red local, Internet, módemo o conexión directa (null modem). Además no sólo es posible jugar en mapas prediseñados, también podemos usar el sistema de generación aleatoria, al igual que establecer el límite de unidades, el tiempo del juego, sí empezamos desde la primera Edad o desde la última, si es tipo deathmatch o un capturar al rey. En fin, como todo en este juego hay una enorme variedad de opciones que podemos manipular al momento de establecer un partido entre varios jugadores, inclusive es posible determinar si es admisible, o no, usar los códigos de trampa (cheatcodes).

En resumen. ¿Qué puedo decir? Genial, imperdible, infaltable en la colección de un jugador, aunque más no sea esporádico, de la categoría RTS. La única contraindicacción va para los fans extremos del rush y el uso de ejércitos monotipo.