La
diversidad y variedad de entornos en los cuales deberemos trabajar es,
por no haber otra forma de decirlo, inucitada. Desde callejuelas y tejados
de una pequeña ciudad, hasta edificios gubernamentales de alta seguridad.
Cada escenario presenta diferentes retos, en algunos cámaras de
seguridad fácilmente evitables, caminos iluminados que podemos abolir
eligiendo otras rutas alternativas o apagando los focos. En otros cámaras
blindadas, o redes de seguridad laser donde la única forma de pasar
es apagándolas o buscando otro camino (el cual --casi siempre--
ya esta dado y al que el diseño nos guía). Cada escenario
esta lleno de detalles visuales que aprovechan al máximo el poderoso
engine de Splinter Cell. Muchas veces arrojar una botella al otro
extremo o apagar una luz son las soluciones sencillas requeridas por un
problema que aparenta ser complejo.
Los diferentes guardias y
otros NPC del entorno, como algunos civiles curiosos, guardaespaldas o
simples transeúntes, tienen de manera inicial un bien pautado conjunto
de comportamientos, ir de aquí allá y luego por allá,
pero, su IA esta siempre atenta a lo inusual, desde luces que se han apagado,
hasta ruidos extraños en las cercanías. En la oscuridad total
no resulta ilógico que choquen con nuestro personaje, den la alarma,
salgan corriendo, desenfunden o directamente empiecen a disparar, casi
siempre todas estas acciones que hay que evitar. La Inteligencia Artificial
no sera muy sofisticada pero presenta rasgos de estar bien hecha y no ser
tan preprogramada. lo cual otorga dinamismo y autonomía a los diferentes
oponentes que deberemos enfrentar. Aunque, claro, si nos escondemos bien,
acaban por aburrirse rápido y volver a su rutina.
El
entorno mismo del juego aunque bien detallado no es nada interactivo. Sólo
aquellos elementos que son parte del diseño ofrecen algún
nivel de dinamismo, como es el caso de algunas ventanas, puertas, consolas
y computadoras. En general las botellas de refresco y vidrio las podemos
utilizar como objeto arrojadizo para hacer ruido y --tratar de-- distraer
a los guardias. Más allá de esto no es posible curiosear
escritorios, ni archivos, ni libreros, ni empujar nada para ayudarnos a
subir o trancar algo.
La adaptación de los
controles al entorno de PC es muy buena. El mouse controla la cámara
dinámica que sigue a nuestro personaje en tercera persona, y que
a veces permite realizar unas cuantas trampas al permitir observar fuera
del alcance real. Los movimientos, acceso a información y otros
afines son realizados a través del teclado, usando para ello teclas
bien elegidas que además pueden ser configuradas a gusto del usuario.
No existen muchas combinaciones especiales pero si un par para ciertos
movimientos sofisticados.
Todo
el entorno gráfico y de sonido es configurable, más allá
de que el sistema autodetecta las mejores opciones durante la instalación,
aunque no por ello es infalible y a veces serán necesarios algunos
retoques para un funcionamiento más eficiente. Aunque el juego esta
diseñado para DirectX 8.1b, se recomienda instalar la versión
DirectX 9, claro que si ejecuta sin problemas con la 8.1b mejor no hacer
nada para evitar mayores dolores de cabeza. Tanto el sistema visual como
el de sonido aprovechan al 100% las capacidades de hardware de última
generación.
Splinter Cell permite
mantener varios perfiles de usuario de tal manera que puede haber más
de una persona jugando en un equipo de computación. Cada perfil
mantiene saves ilimitados al igual que un autosave al final
o inicio de niveles y un quicksave (F5) que resulta muy práctico
en todo momento, con el debido cuidado de no salvar rápido en un
mal momento que puede significar tiempo adicional volviendo a pasar un
nivel. Además mantiene registro de las misiones cumplidas las cuales
podrán luego ser cargadas independientemente y sin orden para jugarlas
nuevamente.
Con
una extensa cantidad de misiones en escenarios variados y cada uno con
diferentes contextos (no eliminar a nadie, libertad de acción) y
más de un objetivo Splinter Cell ofrece jugabilidad para
rato (unas 25-30 horas de juego, mínimo), además que los
perfeccionistas podrán jugar una y otra vez cada misión hasta
hacerla sin eliminar a nadie. A medida que aumentan el número de
artilugios que podemos usar también lo hacen los problemas, como
las ametralladoras-robot que detectan movimiento y no perdonan ni una.
Por obvias razones lo único que este juego no ofrece es multiusuario,
al menos por ahora.
En resumen. Excelente, visualmente
impecable, muy buen audio, buena jugabilidad aunque no tan extendida o
variable como muchos hubieran querido. Un juego que todo aficionado a los
acción-furtivo debe tener, y los que no lo son harían bien
en probarlo.