Un vídeo de introducción de Space Rangers 2: Dominators (también, Rise of the Dominators) muestra con total claridad la oferta del juego al igual que lo que podemos esperar de él. La impresión que deja es muy buena. Lo primero es que se trata de un juego híbrido, con elementos de RPG, estrategia por turnos y RTS; y que presenta, básicamente, tres ambientes de juego. Uno, combate y exploración galáctica; dos, acceso a planetas, estaciones espaciales, etcétera; y, tres, combate en la superficie de los planetas.

La exploración y el combate galáctico trabajan con un paradigma por turnos, pero incluyen el detalle de un sistema inteligente que sabe cuando un número de turnos dado es una secuencia, y que por ende el usuario no tiene por que apretar 'fin de turno' para cada uno de ellos (p. ej. durante viajes sin eventos especiales). Característica que agiliza varios procesos, y acelera la acción para quienes no sean muy amigos de éste concepto de jugabilidad. El combate también es automático, y depende más de estadísticas y atributos que de habilidad real. 

Explorar, combatir y mejorar al personaje y su nave son procesos que se realizan en el mismo contexto. Combinando así la parte RPG con la por turnos. Lo visto en el vídeo permite adquirir una idea de como funciona todo esto. Avanzar al héroe y mejorar su nave están llenos de opciones y alternativas, que van desde ser un guardian espacial, a un pirata. Entre viajes se puede consequir mejor armamento, escudos y equipo para poder enfrentar a los enemigos (parece que hasta naves). Sin dejar de lado una extensa variedad de estaciones espaciales y planetas donde se puede realizar transacciones, y obtener misiones.

A lo anterior, que mucho recuerda a Freelancer, hay que agregarle el contexto mismo del juego: una galaxia con decenas de sistemas solares y centenas de planetas que evoluciona por si sola, y a la que las acciones del usuario afectan en varios niveles perceptibles (p. ej. no enfrentar el avance de los Dominators puede causar que sectores enteros caigan bajo su control). Además, las naves, los enemigos y los distintos sistemas son generados en cada inicio de Campaña por lo que la re-jugabilidad es prácticamente infinita.

Respaldando la aserción del párrafo anterior tenemos que existen cinco razas entre las cuales elegir para el héroe (heroína), cada una con ventajas, desventajas, aliados y enemigos además de tecnología propia (Maloq, Peleng, Humano, Faeyan y Gaalian). También está la presencia de cinco profesiones básicas con habilidades únicas que se puede ir evolucionando (guerrero, mercenario, comerciante, corsario y pirata). No hay que olvidar las cuatro dificultades que van de fácil a imposible, y en todas la IA es muy buena y agresiva.

Si bien existe un objetivo global primario, enfrentar la amenaza de los Dominators, el usuario puede elegir el camino, la forma y el ritmo con el que lo lleva acabo. Lo que permite lidiar con una libertad de elección bastante grande, ya que el jugador puede dedicarse a lo que guste mientras tanto, casi con seguridad con el objetivo más urgente de mejorar su equipo, nave y habilidades. Con tal fin puede dedicarse al comercio, la piratería o la realización de misiones para una y otra facción, al final de cuentas una buena reputación siempre puede ser útil cuando se está en problemas.

Las batallas en superficie son con estilo estrategia en tiempo real clásica y directa, con dos detalles extra: uno, cada usuario podrá armar batallones a gusto gracias a un sistema de personalización de los robots que combaten; seguro que algunas tecnologías para los mismos habrá que buscarlas o comprarlas en modo conquista galáctica. Dos, además de controlar todo desde una perspectiva isométrica el usuario tiene la opción de tomar control directo de una unidad (tipo shooter en tercera persona) y arremeter al oponente junto con el resto de la tropa. No hay nada sobre si las misiones poseeran variedad, otra que destruir al enemigo de tal o cual territorio.

Tecnológicamente el engine de Space Rangers 2: Dominators está tan bueno como puede, y requiere, para su particular estilo híbrido. En modo conquista espacial todo trabaja en 2D pero naves, planetas, estaciones y otros hacen gala de un sistema gráfico claramente 3D. En combate RTS las cosas se ven igual de bien.

En Resumen. Un prometedor juego de Rol, conquista/exploración galáctica y combates RTS, en un contexto que si bien no original, al menos se nota bien implementado y presentado.