No quedan dudas de que Hard Reset es un juego oportunista, de estar bajo el radar y ser desarrollado en absoluto silencio sale a escena justo durante estos meses en que están de moda los shooter con enfoque a la ciencia-ficción y no solo eso, se las arregla para estar listo para salir en Septiembre, poco después que nada menos que Deus Ex: Human Revolution.
Por su fuera poco viene con las características que muchos quedarán buscando después del juego de Eidos Montreal: acción pura y caos en un entorno visualmente moderno y donde mucho es deformable. La historia se pinta como una cruza entre Terminator, Matrix y Blade Runner. Hasta tiene cierto aire de un BioShock en el futuro, pero bueno.
Donde el juego se pone más interesante es cuando nos enteramos de quién lo desarrolla, nada menos que gente que viene de People Can Fly (Painkiller), CD Projekt Red (The Witcher) y City Interactive (Sniper: Ghost Warrior). En si esto no tiene porque implicar nada pero al menos habla bien de la empresa en que trabajaron y los proyectos en los que participaron, algo del pedigree siempre queda aunque sea por rose.
The Flying Wild Hog destaca la naturaleza Indie con corte original de la --ya no tan-- nueva empresa polaca. Su primer producto tiene mucho de prueba de lo que pueden hacer y ofrecer, incluyendo el uso de un nuevo engine desarrollado con Hard Reset en mente, el Road Hog Engine.
Muchos aspectos de lo que se sabe del juego hasta el momento tienden más a mercadeo que a lista de características y capacidades. En tiempos en que todos nos quejamos del modelo multiplataforma de enfoque consolero FWH nos ofrece algo exclusivo para la PC y con Campaña sólo un-usuario que según los desarrolladores refleja el estilo que tenía Doom, Quake e infaltablemente Painkiller. Escenarios grandes, mucho que explorar y gran cantidad de oponentes y cosas para hacer explotar.
Tras la decepción que fue Duke Nukem Forever --para una gran mayoría-- y como todavía falta para Serious Sam 3, Hard Reset llega como caído del cielo para llenar ese vació del mercado. Lo que no deja de ser sospechoso, pero hasta el momento no le veo nada de malo. Lo poco que se sabe promete y quienes tuvieron la oportunidad de verlo en acción hablan bien de él. No tardaremos en saber si acaba como sorpresa del año o uno más en la lista de los olvidados e ignorados.